Sunday, December 25, 2005

La navidad no tiene igual

Hoy 25 de diciembre nuestra celebración de navidad tiene un motivo para ser más alegre, y es que casi coincide con la celebración del comienzo de hanukkah, en el 25 de kislev (este año el 25 de diciembre al atardecer). Mejor aún para aquellos hijos de judíos y cristianos que festejan chrismukkah, celebración que combina ambas tradiciones y que tiene lugar en una fecha intermedia.
En el hannukah principalmente se rememora el milagro de las lámparas, cuando debido a un robo profanatorio sólo quedó aceite ritual suficiente para un día y milagrosamente ardió sin parar durante ocho.
El 25 de diciembre, por otra parte, es uno de esos acuerdos que da gusto encontrar entre las distintas tradiciones cristianas, lo digo por lo triste que es constatar las constantes disputas absurdas que surgen por minucias tales como decir u omitir una conjunción (et) en el credo.
En navidad, además, incorporamos diversos elementos multiculturales, como el arbol de los celtas germanos; si quieren un simple adorno o un reconocimiento de la divinidad presente en todos los seres vivos. En Japón, donde la gente no se divide en budistas y shinto como podría pensarse sino que la mayoría de la población son ambos, también se festeja la navidad; en parte por la gran capacidad de asimilación cultural de los nipones y en parte porque la laudable laxitud de sus tradiciones lo permite.
Si bien de niño no comprendía por qué amigos de familias no-creyentes festejaban la navidad, ahora comprendo perfectamente su lado laico. Y dentro de este diré que soy fan de la navidad en buena parte por los mismos motivos que hacen que me gusten los musicales de Broadway (y no, no soy gay) y es que se lleva de la mano con el jazz. No es jazzista aquél que no haya tocado sus propios arreglos de las típicas canciones gringas, que honestamente -y sin ánimos de malinchismo- son mucho mejores que los peces en el río (y dicho sea de paso, ¿por qué demonios beben?, y en dado caso ¿tenemos la autoridad moral para juzgarlos por eso?).
Tengo amigos que ven al jazz como una música correspondiente a un periodo histórico cultural que llegará a su fin, pero yo lo veo como una gran cosa, un lenguaje que -sí, auqnue tuvo un inicio- permanece y que se extiende, y que como bien dijo Dave Brubeck, absorbe todo como esponja. Lo mismo me gusta pensar de las celebraciones espirituales, aunque se me tache de new age y de superficial.
Un abrazo a mi familia, a mis amigos, a la familia de mis amigos, a Faith y a mi otra familia, y una rememoración muy especial -y siempre presente- de los que viven lejos y de los que ya no están con nosotros.

Tuesday, December 20, 2005

Andy did you hear about this one?

En el tiempo en que uno acaba la universidad, o si uno no tuvo la suerte de tener una educación formal cuando se llega a cierta edad, la gente empieza a cuestionarlo a uno respecto de sus planes y actividades. No hay por qué atribuir esto a un positivismo exacerbado, incluso en una cosmovisión fuertemente contemplativa como lo es la budista a los laicos se les exige "espíritu de devoción y servicio" con su sociedad.
Así que la pregunta es cuándo uno va a dejar de tomarse las cosas a broma. Hoy todo el mundo comienza precisamente por bromear y quiere llegar más allá, cuando antes se requerían años para realmente lograr tomarse las cosas en broma. Lo que los antiguos cínicos ejercitaban a lo largo de toda una vida, hoy cualquiera quiere comenzar haciéndolo, o incluso ir más allá.
Pues bien, en este post quisiera recordar a Andy Kaufman. Quizá algunos han escuchado la canción que le dedicó REM, Man on the moon, (¡qué haría el héroe cómico sin su poeta!)o han visto la película homónima de Milos Forman.
Ahí podemos ver los inicios de Andy como comediante fracasado, mas no en la manera tradicional. En ocasiones su acto consiste en usar un acento de europa oriental y contar malos chistes, pero sin dar una pista de que lo está haciendo a propósito. Otras veces le da vida a Tony Clifton, el cantante fracasado de Las Vegas, cuyo timbre de voz es horrible y no corresponde a sus ridículas florituras al intentar cantar con estilo. Antes de que entre alguien pide que todos en el público apaguen sus cigarros porque el Sr. Clifton tiene la garganta delicada, después de que todos lo hacen entra triunfalmente con un puro en la boca.
Después Andy se da a conocer retando en televisión a mujeres a que lo venzan en el ring. Su misoginia -nuevamente no da indicios de que es una broma- causa indignación en el público, e incluso un luchador profesional le lleva a una "verdadera luchadora" para darle una lección; y finalmente él mismo termina por propinarle una golpiza que lo manda al hospital. Solo que el luchador indignado estaba trabajando con Andy Kaufman y también todo era parte de una broma.
Grandioso Andy que no dejó de bromear incluso cuando supo que el cancer no le daría mucho tiempo de vida, que trató de ayudarse en vano con la meditación pero que finalmente se resignó a que no habría cura. En su último espectáculo, un especial de despedida, realiza entre otras cosas una sección de cowboys. Invita a pasar a una anciana del público y la hace dar vueltas con un caballito de palo cada vez más y más rápido, cuando parece que la ancianita no dará más Andy Kaufman aumenta todavía la velocidad, finalmente cae desmayada. Todos esperan la broma, sin embargo nadie dice una palabra. El presentador pregunta tímidamente "¿Hay un médico en la sala?". Un hombre del público sube y le toma el pulso. "Está muerta dice". Andy Kaufman, vestido de indio, comienza a gritar y a dar vueltas alrededor de ella. El público mira atónito, finalmente aquello se convierte en una danza india que "resucita" a la viejecita.
Hay muchos otros chistes memorables en la carrera de Andy Kaufman. Cuando se presenta como "cantante" y pone el tema de mighty mouse y espera pacientemente a su turno, cuando únicamente tiene que cantar con voz de supre ratón "here i come to save the day". O cuando alguien del público reta a Tony Clifton diciéndole que realmente es Andy Kaufman y justo en ese momento aparece también Andy Kaufman en escena (Tony Clifton era en esa ocasión el co-escritor de Andy). ¿Qué más puedo decir? Incluso en su funeral pasaron un video donde Andy los gracias a todos y los obligaba a cantar "it's a happy happy world". "Gracias a todos ustedes" dice al final de su video-testamento "por hacer a este mundo un mundo muy feliz". Y todo esto de un hombre que en toda su vida no fue más allá de las bromas.

Monday, December 19, 2005

Another Brick in the Wall

En la primaria donde estudié a la directora se le ocurrió hacer un programa para mejorar la ortografía de los alumnos. Consistía en lo siguiente:

a) los alumnos comprarían un cuaderno tipo italiano que rotularían como "diario"
b) en él escribirían diez renglones diarios con lo que quisieran, lo que hicieron en el día, o sus intereses (yo hablé largamente de videojuegos).
c) los padres corregirían los errores de ortografía y los alumnos tendrían que repetir cada error corregido tres veces
d) a fin de mes los alumnos debían de entregar el cuaderno y un ejército de maestras (a veces le tocaba a uno entre ellas a la directora) revisaría que las correcciones de los padres estuvieran bien hechas (normalmente faltaban correciones) y agregarían las necesarias, las cuales para el siguiente mes el alumno tendría que haber agregado

Pues bien, el asunto típico de alumnos-contra-el-sistema surgía. La cosa era como librarse de aquella maldición. Lo primero por supuesto era hacer la letra grande, ser repetitivo, poner cualquier estupidez. Pero evidentemente uno no se sentaba diario a escribir en el cuadernito, sino que uno lo hacía un día antes de la entrega, por lo que las ideas se agotaban muy rápido.
Fue así como uno de esos días locos de entrega, en sexto de primaria, se me ocurrió copiar algo de un libro que estaba leyendo. Era Drácula de Brahm Stocker. Antes de llegar a lo bueno, a las mordidas en el cuello y a las mujeres bellas y lánguidas que es necesario degollar porque de todas maneras ya están muertas, Jonathan Starker describe con detalle su viaje hacia Transilvania. Yo no era tan estúpido como para copiar pasajes inmediatamente reconocibles, así que aproveché el principio del libro y puse como título "Viaje imaginario". Después escribí algo como "A continuación relataré un viaje imaginario". Pues bien, comencé sin cambiar una palabra la descripción en primera persona de Starker, su paso por Munich y su llegada a Bucarest, el pollo con pimentón cuya receta le parece imperativo pedir aunque le provoca sudores por la noche, sus arreglos para viajar en carruaje. La prudencia me indicó detenerme antes de llegar a Transilvania, pero por suerte salieron páginas y páginas gracias a ese truco.
Hace un par de años me encontré ese cuaderno y traía un recado de la directora misma: "Miguel, me encantó tu viaje imaginario. Ojalá sigas cultivando la apasionante actividad de escribir". Algo así. Creo que años después se encontró a mi madre y se seguía acordando de lo bien que escribí aquel viaje hacia el corazón de Europa Oriental.
Releí algunos pasajes de mi vergonzoso plagio a Brahm Stocker y pues, fue grato que me creyeran capaz de hacer eso, quizá ayudado porque alguna vez gané uno de esos concursos de cuento en la escuela, pero me pareció estúpido que si realmente pensaran que un alumno de sexto escribió eso no se volvieran locos. Es decir, eso me haría una especie de genio o algo así (en vez de un vulgar pícaro). Creo que tendrían que haber hecho algo más, algo así como sacarme rápidamente un programa para viajar en calidad de invitado de honor a Ethon College o ponerme a tomar clases de latín o meterme a esos talleres que daba García Márquez en el Pedregal, o de perdida darme una pinche beca en su escuela.
Creo que eso es parte de lo que está mal con nuestro sistema educativo, que cosas así les pasen de largo. Que no soy un genio literario pero que bien podría haberlo sido y que eso hubiera pasado desapercibido (y cuántas veces no habrá sucedido con otros niños) como cuando Maggie toca el cascanueces en su pianito y Homero la calla porque está viendo Miss Universo. Tanta ineptitud me hace sentir justificado -y hasta orgulloso- por aquel plagio.

Sunday, December 18, 2005

Quod Libet

La filosofía franciscana dejó una tradición en inglaterra, según la cual la experiencia de los sentidos (notitia intuitiva) es el verdadero conocimiento, y la abstracción que hace el intelecto (notitia abstractiva) es sólo una forma imperfecta de aquél, un substituto barato en su ausencia.
El otro día, tras leer apasionadamente uno de los libros que relatan las aventuras de Maqroll, reflexioné sobre la impresión que tenía de su autor. Lo primero que se advierte de la prosa de Álvaro Mutis es que es completamente limpia, de esa que lo hace olvidar a uno que está leyendo. Sin embargo lo que más resalta es que no se encuentran en absoluto pretensiones, ni siquiera las más escondidas, que son las de la sencillez y la espontaneidad. En los diálogos no se ve una necesidad del autor de hacerlos coloquiales o creíbles, sino que son abiertamente literarios, pero de un modo en que resulta cómodo leerlos. A estas virtudes se pueden agregar las de el lirismo abierto de quien sabe que está inventando una historia, lejos de la actitud cerebral y burlona del cínico, o de la burda poética del cínico que quiere dejar de serlo. Pues si bien algunos de los mejores escritores de nuestro tiempo se dedicaron a desmenuzar lo cotidiano hasta reconfigurarlo de manera apasionante, pocos se atrevieron a escribir una auténtica novela de aventuras.
Así que llegué con mi hermana, quien envolvía cuidadosamente un regalo de navidad que compró para nuestra abuela.
- ¿Alguna vez has leído a Álvaro Mutis? - pregunté.
- No - me dijo más concentrada en seguir envolviendo que en lo que yo tuviera que decirle.
- Es excelente. Muy sencillo, muy sincero. Se ve que es una gran persona.
- Es un mamón, y también su esposa.

Monday, December 12, 2005

Peri Technei

En su tiempo se repitió hasta el cansancio: "sólo Paganini toca Paganini". Surgió el rumor de que tenía un pacto con el diablo, tiempo después también se llegó a pensar que tenía el síndrome de Elehrs-Danlos, que permite una flexibilidad anormal en las articulaciones.

¿Cuál es la respuesta correcta? Según la navaja de Ockham la que postule un menor número de causas para explicar lo mismo. El síndrome de Elehrs-Danlos tipo II implica una hipoermovilidad debida a una baja producción de colágeno, deficiencia que tiene su origen en el historial genético familiar, probablemente por una deficiencia de tenascin X en el gen TNXB, aunque no se descarta la participación del gen COL3A1. La otra hipótesis, por otra parte, implica que el diablo existe y que haya hecho un pacto con Niccolò Paganini. Por lo tanto desde este punto de vista es más razonable afirmar que Paganini tenía un pacto con el diablo. Sin embargo ambas hipótesis no se excluyen mutuamente, y es posible que fuera lo suficiente imbécil para vender su alma siendo que por tener el síndrome de Elehrs-Danlos no lo necesitaba.

De hecho nada de esto es verdad. Hoy en día muchísimos tocan las piezas de Paganini, y esto se debe sencillamente al avance de la técnica (y a la pobre visión que tuvieron violinistas y compositores durante algún tiempo). La téncica es, fundamentalmente, realizar los movimientos de la manera más económica para maximizar velocidad y fuerza.

Cuando hablamos de técnica no se trata de un elemento más dentro de cada disciplina, hay toda una cosmovisión detrás de esta palabra (y sí, habrá que admitirlo, algo de razón instrumental). Tristemente en muchas areas de la vida humana la técnica apenas se conoce. En literatura todavía algunos siguen mistificando el "estilo" o la "voz" de los poetas (aunque un exceso de desmitifación es chocante, tipo "The philosophy of composition"), la meditación se ve como algo exótico y no se reconoce el enorme potencial que puede tener simplemente el ahorrar costes psíquicios.
Basta con ser analítico, creativo y paciente. Descomponer todo en pasos y experimentar de los modos más diversos, una y otra vez, hasta obtener cada vez mejores resultados. Tan buenos que los simples os creerán poseedores de poderes ultraterrenos.